Descubre las claves del Guerrero II
El origen mitológico narra que Virabhadra surgió de la ira de Shiva por la muerte de su esposa Sati. Ésta, después de ser humillada por su propio padre, reunió todas sus fuerzas logrando que su propio cuerpo ardiera en llamas. Después de este suceso, Shiva se sumió en una profunda tristeza que dio paso a una ira desatada. Shiva se arrancó un cabello arrojándolo a la tierra y de ahí surgió el más terrible de los guerreros Virabhadra, para matar a Daksha, el suegro de Shiva, vengando así la muerte de Sati.
Virabhadrâsana II (El Guerrero II) es una postura de pie que, como el resto de su familia, busca trabajar el enraizamiento, el alineamiento, el fortalecimiento de las piernas, el alargamiento de la columna, el aplomo y estabilidad.
Virabhadrâsana II aporta fortaleza, estabilidad y confianza.
Claves del Guerrero II:
– Piernas activas y con una separación que permita que la rodilla de la pierna que está flexionada esté en línea con el tobillo y el muslo esté en un ángulo de 90º.
– Ambos pies enraizados a la esterilla.
– Los dos costados se alargan por igual (manteniendo el eje central del cuerpo en línea con la cadera)
– Brazos activos y en línea con los hombros
– Mirada hacia la mano de delante
Errores en esta postura que pueden generar una lesión:
La rodilla de delante está desalineada respecto a la cadera que se encuentra rotada hacia el interior. Esta situación de la pierna puede ocasionar un daño tanto en los ligamentos de la rodilla como el menisco. Además, crea la necesidad de compensar toda la posición apoyándola en la zona lumbar y aumentando su lordosis.
La posición del pie de atrás (debería girar hacia dentro algo más) puede ocasionar un riesgo para la rodilla al estar apoyándose en ella.
Los costados están desalineados respecto al eje central del cuerpo, llevando el apoyo de la postura hacia delante.
Para ajustar todos estos desalineamientos es necesario un profesorado formado y con experiencia ya sea en presencial u online.